La Alhambra
El conjunto monumental de La Alhambra, donde vivieron los reyes nazaríes con toda su corte entre los siglos XII y XV, está formado por la Alcazaba (ciudad militar amurallada), los Palacios, los jardines del Generalife y una infinidad de patios (el de Los Leones es el más bonito), fuentes e impresionantes muestras de arte morisco.
Pero en su época dorada su interior escondía mezquitas, talleres, escuelas, jardines, fuentes, amores, desamores, casas, gatitos, negocios, diversión y sufrimientos.
Han pasado siglos desde que la reconquista acabó con la hegemonía árabe, y ni siquiera Napoleón pudo acabar con ella: parece que un soldado español no quiso obedecer su orden de demolerla con explosivos. Menos mal!
El Albaicín
El Albaicín es el antiguo barrio árabe de Granada. Con sus calles empinadas y empedradas y sus casas cuyos muros blancos resaltan los colores de las buganvillas, es uno de los símbolos de la ciudad. Solo por llegar al mirador de San Nicolás acompañados por la fragancia de los jazmines y las melodías de los músicos callejeros con sus guitarras merece la pena… vaya si merece la pena! Las vistas desde allí son espectaculares!
El Sacromonte
Es probablemente uno de los barrios con más encanto de la ciudad y famoso por sus casas-cuevas. Aquí se instalaron los gitanos que acompañaron a las tropas de los Reyes Católicos cuando conquistaron la ciudad. Se unieron más tarde artistas bohemios y artistas flamencos que hechizan a todos en sus característicos espectáculos: las zambras.
Con el paso del tiempo esta zona ha perdido un poco de autenticidad, pues si antes podías tener la suerte de toparte con performances improvisadas en la calle, ahora el espectáculo lo vas a ver en los tablados flamencos, aun así el Sacromonte es una de las cosas que ver y hacer en Granada.